CREDO UT INTELLIGAM, FIDES QUAERENS INTELLECTUM

CREDO UT INTELLIGAM, FIDES QUAERENS INTELLECTUM

I.Credo ut intelligam: el creer preexiste al conocer

Toda búsqueda de conocimiento y de verdad presupone fe en nuestros sentidos y en nuestra capacidad mental para encontrarla. Creer apriorísticamente que algo es imposible, incapacita totalmente para investigarlo. Nadie investiga la cuadratura del círculo, porque cree que es imposible que exista.

El hombre prehistórico de hace 2 millones de años creó la primera industria lítica, el primer cuchillo de piedra, porque creyó que era posible esa transformación; daba una piedra contra otra hasta que aparecía un lado cortante. Sin esa fe del hombre del Paleolítico inferior en su capacidad mental y manual, no existiría hoy la civilización megalítica: la pirámide de Keops, con piedras talladas y elevadas a 147 metros de altura.

Porque la mente humana creyó que las facultades extraordinarias del psiquismo eran posibles, existe la Parapsicología científica desde 1969. Existen laboratorios universitarios para detectar las capacidades humanas supra-normales en Edimburgo, Utrecht, Carolina del Norte.

Porque la mente humana evolucionada, receptiva de luces superiores creyó en la supervivencia del alma, más allá de la muerte biológica, existen hoy las psicofonías científicas. Existen las certezas científicas que confirman y establecen las creencias religiosas de las tradiciones espirituales precientíficas: Neandertales, faraones, celtas, budistas, judías, cristianas, musulmanas, taoístas chinas.

II.Fides quaerens intelectum: fe adulta, motivada, comprometida y transformadora del creyente en mejor persona.

Es una fe ilustrada y plenamente consciente de los sólidos fundamentos que existen para creer en algo superior, sobrehumano y divino. Yo motivo mi fe en Jesucristo en su transcendencia y superioridad humana y divina, en tres hechos objetivos e históricamente ciertos:

1)Los Evangelios interpretados por grandes exégetas conocedores de los distintos idiomas en que fueron escritos y traducidos; conocedores del contexto histórico y cultural en que fueron escritos; conocedores de otras fuentes de información, creíbles y convergentes con los relatos evangélicos sobre la existencia de Jesucristo, sobre la colonización de Israel por Roma en tiempos de Jesucristo, sobre Poncio Pilato.

He comprobado la veracidad geográfica de los Evangelio sobre Israel, recorriéndolo de Norte a Sur, desde el monte Tabor hasta Jerusalén y Mar muerto.

2)La trascendencia humana y divina de Jesucristo. Identificó el amor al prójimo con el amor a Dios (Mt 25). Hizo del amor al prójimo, un mandamiento semejante al mandamiento del amor a Dios. Antepuso la misericordia y la ayuda humanitaria al culto divino en el templo, se autoproclamó uno e idéntico con Dios: «El que me ve a mí y me escucha, ve y escucha a Dios».

3)La transformación radical de los 12 apóstoles y de Pablo de Tarso por la experiencia directa de Jesucristo resucitado. Es un hecho históricamente incuestionable.

Lo contrario de “Fides quaerens intellectum” es una fe infantil, crédula, supersticiosa, ciega, desmotivada, descomprometida con el cambio personal y social. Una fe que no transforma al creyente en mejor persona y en agente de cambio social, no es fe verdadera, no es fe cristiana.

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III.Ecclesia semper reformanda: Anti-reforma desde la fidelidad a lo esencial y permanentemente importante.

¿Qué es lo esencial y permanentemente importante en la salvación humana? En mi opinión, son importantes y esenciales, siempre mejorables y perfectibles, estas creencias y comportamientos humanos:

a) Una creencia en una trascendencia divina: un Dos-Amor absoluto, creador y perfeccionador de todo lo vivible y lo invisible. Una entidad superior que trasciende toda deidad tribal, nacionalista, mitológica, antropomórfica, irascible, colérica y vengativa; supera un Dios de los ejércitos, violento y creador de infiernos eternos,

Esa entidad trascendente y divina, siempre en proceso evolutivo en la mente humana, debe ser siempre Padre misericordioso, Madre protectora. En su nombre no se justificarán nunca guerras humanas, ni hogueras inquisitoriales, anatemas ni excomuniones.

¡Del anatema al diálogo!. De un mensaje salvífico inculturalizado en una filosofía griega y en un derecho romano a un mensaje salvífico inculturizado en la Iglesia autorreformada en el Concilio Vaticano II, en este lenguaje: “Gaudium et Spes”, para la humanidad entera.

b) Vivir creciendo en unión y semejanza con Jesucristo; en interiorización de sus valores éticos y espirituales, en exteriorización de su estilo de vida, en esperanza de resurrección y vida eterna como El.

c) Vivir creciendo en felicidad, en felicidad temporal y eterna mediante nuestra unión cada vez más perfecta con la fuente inagotable de toda felicidad y vida superior. ¿Cuál es esa Fuente?. El Dios más omnisciente y amoroso que sacó el gran orden cósmico del gran caos del Big-Bang. El Dios omnipotente y amoroso que mantiene imperecedera la dinámica evolutiva, que emergió en la gran explosión que dio origen al tiempo, espacio y materia, hace 14 mil millones de años. La Iglesia católica tiene futuro, si sabe evolucionar y crecer en semejanza con Jesucristo. La Iglesia católica sobrevivirá como institución e instrumento de salvación para la humanidad universal, si sabe ser nueva levadura cultural y espiritual en la nueva masa humana, creada por los grandes avances científicos, tecnológicos, informáticos, organizativos, éticos y espirituales. Las nuevas ciencias, las nuevas sensibilidades espirituales, inherentes a la dinámica evolutiva de la especie humana, exigen una Iglesia capaz de autocrítica, de cambio y auto-reforma, para estar a la altura de los tiempos.

Desde mi punto de vista, han quedado obsoletas y necesitadas de reforma estas concepciones teológicas y actitudes de la Jerarquía católica:

1.- La creación ex nihilo. La nueva física cuántica sostiene la teoría del vacío cuántico; espuma cuántica, energía oscura. Es una energía sin masa, omnipresente, matriz de toda materia. No existe el vacío energético. Existe matriz de toda materia. Existen unos misterios: plenitud energética invisible, indetectable.

2.- El pecado original, heredado por transmisión sexual. Adán y Eva no existieron como personas históricas. Son entidades humanas simbólicas y místicas.  Representan una nueva especie superior al animal en el relato mítico de la creación. Son capaces de conocer y elegir el bien y el mal. Hacer responsables a los niños recién nacidos de pecados ajenos, de pecados míticos cometidos por personajes míticos es absurdo, injusto y cruel.

3.- La muerte vicaria de Jesucristo. Encuentro totalmente inaceptable la imagen de Dios ansioso de sangre humana para transformar su cólera en misericordia y perdón.

4.- La Cristología de Nicea. No puedo creer que Jesucristo no sea una persona humana. No puedo comprender el sufrimiento humano de Jesús, si no era persona humana. Como persona divina, no puede sufrir.

5.- Infierno eterno. Incompatible con la misericordia eterna.

6.- Celibato sacerdotal obligatorio y prohibición del sacerdocio para la mujer.